Las camisetas sin mangas son un 26% más ligeras que las tradicionales de tirantes y, tal y como pudieron comprobar los Golden State Warriors, no limitan los movimientos de los jugadores. Ya el último entorchado europeo conseguido hace un año tuvo algún matiz milagroso, de algo que solo ocurre una vez en la vida, pues Scariolo y sus pupilos acudieron a la cita con la cabeza gacha y sin muchas expectativas, y acabaron ganando el oro ante Francia.